martes, 4 de mayo de 2010

LENGUA-LECTURA

EL DULCE MILAGRO







¿Que es esto? ¡Prodigio! Mis manos florecen.


Rosas, rosas, rosas a mis dedos crecen.


Mi amante besóme las manos, y en ellas,


¡oh gracia! brotaron rosas como estrellas.






Y voy por la senda voceando el encanto


y de dicha alterno sonrisa con llanto


y bajo el milagro de mi encantamiento


se aroman de rosas las alas del viento.






Y murmura al verme la gente que pasa:


"¿No veis que está loca? Tornadla a su casa.


¡Dice que en las manos le han nacido rosas


y las va agitando como mariposas!"






¡Ah, pobre la gente que nunca comprende


un milagro de éstos y que sólo entiende


Que no nacen rosas más que en los rosales


y que no hay más trigo que el de los trigales!






Que requiere líneas y color y forma,


y que sólo admite realidad por norma.


Que cuando uno dice: "Voy con la dulzura",


de inmediato buscan a la criatura.






Que me digan loca, que en celda me encierren


que con siete llaves la puerta me cierren,


que junto a la puerta pongan un lebrel,


carcelero rudo carcelero fiel.






Cantaré lo mismo: "Mis manos florecen.


Rosas, rosas, rosas a mis dedos crecen".


¡Y toda mi celda tendrá la fragancia


de un inmenso ramo de rosas de Francia!