LEYENDA DEL TIMBO
Cuenta la leyenda recopilada por Lázaro Flury que un famoso cacique guaraní llamado Saguaá adoraba a su hija Tacuareé. Esta se enamora del cacique de una tribu lejana y abandona a su padre, quien desesperado sale a buscarla.
En su búsqueda afronta mil peligros, y en su desesperación cree escuchar sus pasos en la selva, por lo que apoya frecuentemente el oído sobre la tierra. Ya al límite de sus fuerzas, cae rendido por la fiebre, y muere con el oido pegado a la tierra.
Cuando tiempo después los hombres de su tribu lo encuentran, descubren que su oreja está unida a la tierra, por lo que deben cortarla para rescatar el cuerpo. La oreja había hechado raíces, y dá origen al árbol del timbó, o cambá nambí, característico por sus frutos en forma de oreja.